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Esta vez ha sido una escapada de fin de semana a Berlín, incluyendo el lunes, y con la familia. Un destino, que no estaba entre los pendientes, pero que ha subido muchos puestos en el ranking de los sitios que recomendaría para visitar.

Nos fuimos un viernes por la tarde en el último de los 3 vuelos diarios que tiene Iberia para Berlín, llegando al aeropuerto de Tegel sobre las 22:30 de la noche.

Ni que decir tiene que los asientos de Iberia cada vez son más pequeños, y no se puede ni respirar. Es casi recomendable viajar con rodilleras, porque te estás dando golpes constantemente con el asiento de delante. Tampoco diremos nada de los retrasos y de cómo Iberia los enmascara para que no aparezcan en las estadísticas. Por ejemplo, cuando salimos lo hicimos con 30 minutos de retraso, en la puerta de embarque ponía la nueva hora, pero en las pantallas de información seguía apareciendo la hora de salida anterior. A la vuelta también llegamos con 30 minutos de retraso. En fin, que no nos llega de sorpresa las cosas de Iberia, pero es el único vuelo directo a Berlín y para un viaje tan cortito no compensa hacer escalas.

Nos alojamos en el hotel NH Berlín Mitte, muy cerca del Potsdamer Platz, muy bien situado y comunicado, y el hotel una maravilla. Desde el aeropuerto se puede llegar al centro de Berlín en Taxi. No está lejos y no sale caro. Se puede tardar 30 minutos y te costará unos 20 euros. No merece la pena contratar ningún traslado. En general, el Taxi es una buena opción para moverse.

Para el primer día decidimos hacer una excursión en español por el centro de Berlín. Para ello, encontramos a Ricard de Cultourberlin. Lo mejor de todo el viaje fue, sin duda alguna, la visita que nos preparó Ricard. La pasión que le puso a las explicaciones, las formas de contar los hechos, las fotografías que va enseñando a lo largo del camino (a pie), todo ello te transporta a aquella época y te hace sentir lo que aquella gente tuvo que pasar. Más que recomendable, diría que es obligatorio. Si decides ir a Berlín no puedes dejar que otros te guíen, debes contactar con ellos, verás como no te arrepientes. 

Al final de toda la visita acabamos en el barrio de San Nicolás, junto a Alexanderplatz, en un restaurante típico, Mutter Hoppe, con un entorno muy bonito, aunque hay que decir que el Codillo NO es su especialidad. Nosotros lo pedimos y no salimos muy convencidos, pero el resto estaba estupendo.

Por la tarde, después de comer, nos dimos un paseo en barco por el río Spree, pues salían desde la Catedral, muy cerca de donde estuvimos comiendo. 1 hora de recorrido por un precio un poco elevado, pero puede gustar.

Como el tiempo no acompañaba, pues se puso a llover, nos fuimos al museo que está justo a lado de CheckPoint Charlie, Mauermuseum, que nos recomendó Ricard. He de decir que no soy mucho de Museos y mis opiniones no deben ser tenidas muy en cuenta en este sentido. Me pareció demasiado caro aunque interesante, y eso que no nos dimos cuenta y resulta que había 2 plantas y solamente vimos la primera. Parece ser que como estaban de reformas se nos pasó la escalera de subida.

Seguía lloviendo y nos fuimos al hotel, que estaba a dos pasos y descansamos un rato, porque la visita de por la mañana dejó huella.

Por la noche fuimos a cenar a un restaurante de la cadena Lutter & Wegner, Los espárragos estupendos, el escalope pasable. Buena comida y no excesivamente caro.

Al día siguiente el hotel nos proporcionó un guía que nos llevaría a Potsdam. Ricard había dejado el listón muy alto y sabíamos que sería difícil de superar, pero la persona que nos llevó a Potsdam no nos aportó nada. El caso es que fuimos, pasamos por el puente de Glienicke \"El puente de los espías\" donde los espías se pasaban la información, vimos Cecilienfhof por dentro y Sanssouci por fuera, porque no teníamos reserva.




Intentamos ver algo de la ciudad de Potsdam, pero entre la lluvia y el desconocimiento del guía decidimos volvernos a Berlín.

Nos bajamos en Kurfürterdamm Platz, la recorrimos, arriba y abajo, buscando un restaurante en el que un amigo de mi padre estuvo hace 5 años. Sin nombre de restaurante, sin nombre de calle.....nada.....excepto las indicaciones de cómo acceder: \"...Desde las cafetería de los espías, la acera de enfrente en ascendente la segunda o tercera a la izquierda. Tiene dos barriles en la puerta y hace casi esquina...\" Juanjo, te mando un abrazo....pero las explicaciones no nos sirvieron para nada.

Al final comimos en otro que no estuvo nada mal, y encima pudimos ver la fórmula 1, aunque esté dejando de tener emoción.

Después de comer nos fuimos a visitar el Reichstag, sede del Bundestag Alemán. Su cúpula de cristal impresiona, y las vistas son espectaculares. Lo mejor de todo es que es gratis, aunque haya que hacer algo de cola.



El resto del grupo estaban agotados y se fueron para el hotel, pero nosotros nos fuimos a Alexandrplatz. Para nuestra sorpresa, había música en directo, buen ambiente y había salido el sol. Estuvimos paseando, haciendo fotos, de compras....y nos volvimos al hotel.

Por la noche, fuimos a cenar a un restaurante Italiano que está justo en Postdamer Platz, haciendo esquina con Postdamer Str. y Alte Postdamer Str. Demasiado caro para mi gusto, pero cenamos muy bien.

Como había mejorado el tiempo, me fui hacer fotos nocturnas por el Sony Center y la puerta de Brandemburgo, porque el resto no merece mucho la pena por las noches, porque la iluminación no es que sea una maravilla.

Ya el lunes, como nuestro vuelo salía por la tarde, nos fuimos a ver el Palacio de Charlottenburg. Nos cogimos el abono diario para el transporte público y lo usamos todo el día. El Palacio....bueno, si tienes tiempo de ir....pues ves, pero no es que sea ninguna maravilla. Nos volvimos a KurFürterdamm y nos encontramos puestos de mercadillo, salchichas, atracciones....en fin, muy animado. Nos comimos la salchicha como nos recomendó Ricard, la Curry Wurst, que estaba tremenda.

Nos volvimos al barrio de San Nicolás, que nos encantó, y estuvimos tomando unas cervezas y más salchichas. Nos dimos otra vuelta por Alexanderplatz y nos volvimos al hotel para recoger las maletas y salir en taxi hacia el aeropuerto.

Esto ha sido un breve resumen de la escapada a Berlín. Espero que te guste y que, si tienes la opción de ir, te guste a ti también. Como comentaba al principio, Berlín no estaba entre mis preferencias, pero ha ganado muchos puntos para los viajes que recomiendo.

Ya he subido algunas fotos a la GALERÍA de Berlín, e iré subiendo más. Espero que te gusten.

Un saludo, Alberto.

PD. Ya tenemos nuestro próximo viaje......Dublín.

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Gente en la conversación

  • Invitado - TIO TXEMA

    precioso fin de semana espero algun dia ver mas fotos.gracias txema eres un artista

  • Invitado - Cultourberlin

    Buenos días desde Berlín!!!!

    Los guías de Cultourberlín te agradecemos de nuevo que confiaras en nosotros para visitar Berlín y sus alrededores. En Marzo 2009 celebramos nuestro primer aniversario ofreciendo 2 tours más, con lo cual ya son 6 maneras distintas de disfrutar de esta fantástica ciudad. Aprovechamos la ocasión para pedirte tu ayuda una vez más, pasándolo a aquellos que sepas que van a venir a Berlín, o a quién le pueda interesar para su negocio.

    Muchísimas gracias y te deseamos el mejor de los veranos!!!!!